This is historical material “frozen in time”. The website is no longer updated and links to external websites and some internal pages may not work.

Search form

The White House
For Immediate Release

MENSAJE SEMANAL: Recordando el primer aniversario de la tragedia en Newtown, Connecticut

LA CASA BLANCA

Oficina del Secretario de Prensa

______________________________________________________________________________

EMBARGADO HASTA LAS 6:00 AM ET, del SÁBADO, 14 de diciembre, 2013

MENSAJE SEMANAL: Recordando el primer aniversario de la tragedia en Newtown, Connecticut

WASHINGTON, DC —En su mensaje semanal, el Presidente Obama honró la memoria de los 26 niños inocentes y trabajadores escolares que nos fueron arrebatados hace un año en Newtown, Connecticut.

El audio y el vídeo del mensaje estarán disponibles en línea en el sitio obamawhitehouse.archives.gov a las 6:00 a.m. hora del este, el 14 de diciembre de 2013.

Comentarios de Presidente Barack Obama

Mensaje semanal

La Casa Blanca

14 de diciembre de 2013

Hace exactamente un año, una ciudad tranquila y pacífica se vio devastada por un acto de violencia atroz. 

Seis trabajadores de escuela consagrados a su labor y 20 niños preciosos desaparecieron para siempre de nuestras vidas.

Como padres, como estadounidenses, la noticia nos causó dolor. Newtown es un pueblo similar a muchas de las ciudades en las que nacimos varios de nosotros. Las víctimas eran educadores y niños que podrían haber sido hijos de cualquiera de nosotros. Nuestros corazones quedaron destrozados por las familias que perdieron un pedazo de su corazón, por una comunidad que nunca será la misma, por los supervivientes tan jóvenes cuya inocencia les fue arrebatada demasiado pronto. 

Pero bajo ese manto de tristeza, también nos invadió un sentido de determinación: la convicción de que debemos poner fin a estas tragedias y que, para lograrlo, debemos cambiar.

Desde el primer momento, los padres y las madres de Newtown lideraron nuestros esfuerzos con una valentía inconcebible y tomaron la iniciativa con la esperanza de poder evitarles a otros una amargura de este tipo. Y se les unieron millones de estadounidenses –madres y padres, hermanas y hermanos– que se negaron a aceptar estos actos de violencia como algo inevitable.

Durante los últimos doce meses, sus voces nos han infundido valor. Y su ejemplo nos ha servido de inspiración para ser mejores padres y vecinos, para darles a nuestros hijos todo lo que necesitan para enfrentarse al mundo sin miedo, para cumplir con nuestras responsabilidades no solo en el ámbito de nuestras familias sino también en nuestras comunidades. Más que por la tragedia misma, todos recordaremos a Newtown por esta razón.

De manera que hoy, en este aniversario de una fecha que nunca olvidaremos, ese es el ejemplo a seguir. Porque a pesar de que todavía no hemos logrado hacer lo suficiente para que nuestras comunidades y nuestro país sean más seguros, no podemos detenernos. Y no podemos olvidarnos de que los cambios verdaderos no van a venir de Washington. Los cambios vendrán de donde vienen siempre: de ustedes. Del pueblo estadounidense. 

Como nación, no podemos impedir todos los actos de violencia. No podemos curar todas las mentes enfermas. Pero si queremos vivir en un país en el que podamos ir a trabajar, mandar a nuestros hijos al colegio y caminar por nuestras calles sin ningún temor, debemos seguir esforzándonos. Debemos seguir siendo solidarios. Debemos tratar a todos los niños como si fueran nuestros propios hijos. Al igual que la gente de la escuela primaria Sandy Hook, debemos escoger el amor. Y juntos, debemos cambiar.

Gracias.

###