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La crisis fiscal de Puerto Rico: Lo que necesitas saber

Summary: 
Estos son los hechos reales detrás de 7 mitos que pueda llegar a escuchar sobre la legislación para ayudar Puerto Rico superar su crisis de dueda

El Congreso debería aprobar una legislación integral, bipartidista para hacer frente a la crisis fiscal de Puerto Rico antes del 1 de julio.  H. R. 5278, la Ley de Supervisión, Administración y Estabilidad Económica de Puerto Rico (PROMESA, por sus siglas en inglés) ya ha sido aprobada por el Comité de Recursos Naturales de la Cámara de Representantes por una abrumadora mayoría bipartidista. No hacer nada sería relegar a Puerto Rico a una espiral descendente, caótica y desordenada con el riesgo de empeorar la crisis humanitaria.

Estas son las correcciones a los conceptos erróneos y perjudiciales sobre PROMESA y las importantes herramientas que proporciona para hacer frente a una crisis que está lastimando a 3.5 millones de estadounidenses en Puerto Rico.

  1. MITO: Puerto Rico puede conseguir una mejor oferta del Congreso después del 1 de julio o el próximo año.
    • A Puerto Rico se le ha acabado el tiempo y el efectivo. Ya ha comenzado una situación de impagos de la deuda, de forzar su suerte con los proveedores y de recorte en los servicios esenciales.
    • El 1 de julio, Puerto Rico se enfrentará a casi $2,000 millones de dólares en pagos para los que no tiene el dinero para pagar. Los acreedores pueden presentar demandas para obligar a Puerto Rico a pagar sus deudas en lugar de proporcionar los servicios esenciales.
    • Lo único cierto es que sin una acción por parte del Congreso, la crisis va a empeorar mucho más.  Para aquellos que están luchando por los 3.5 millones de estadounidenses en Puerto Rico, sería irresponsable permitir que la situación empeorara cuando no existe una verdadera alternativa al proyecto de ley actual. 
    • La realidad es que la legislación de Puerto Rico requiere un compromiso bipartidista. Y al igual que con cualquier compromiso, hay partes de esta legislación que no apoyamos, que nos gustaría fueran mejores.
    • Pero por el momento, tenemos un acuerdo que:
      • Detendría inmediatamente un litigio costoso y perjudicial
      • Mantiene todas las deudas de Puerto Rico sobre la mesa
      • Prohíbe excepciones o favores especiales para los acreedores
      • Respeta el autogobierno de Puerto Rico mientras proporciona transparencia y la supervisión necesaria
      • Protege las pensiones y los servicios esenciales
    • Seguiremos haciendo todo lo posible para mejorar el acuerdo que está sobre la mesa, pero hay que reconocer que este es un acuerdo que tanto demócratas como republicanos deberían poder respaldar.
  2. MITO: PROMESA favorece los fondos de cobertura sobre el bienestar de los 3.5 millones de estadounidenses en Puerto Rico.
    • PROMESA exige un sacrificio compartido de los acreedores de Puerto Rico para lograr una solución sustentable para Puerto Rico. 
    • PROMESA pone todos los pasivos de Puerto Rico sobre la mesa, sin excepciones especiales ni rescates financieros para los acreedores de Puerto Rico.
    • Y a diferencia de las actuales leyes de Puerto Rico, PROMESA no tiene excepciones especiales ni rescates financieros para los acreedores.
    • Simplemente no es cierto que PROMESA favorezca los fondos de cobertura. Todo lo contrario, los fondos de cobertura y otros poderosos intereses financieros han gastado millones de dólares en anuncios de ataque y contratado grupos de presión bien conocidos para trabajar con el fin de derrotar la legislación.
    • El 1 de julio, Puerto Rico se enfrentará a casi $2,000 millones de dólares en pagos para los que no tiene el dinero para pagar. Sin este proyecto de ley, el futuro de Puerto Rico estará en manos de sus acreedores, no de su pueblo.
  3. MITO: Puerto Rico no tendrá voz en la junta de supervisión.
    • PROMESA crea una junta de supervisión independiente para ayudar a implementar las reformas necesarias, respetando el autogobierno de Puerto Rico.
    • Los líderes del Congreso de ambos partidos se han comprometido a trabajar con el Presidente Obama para dejar a un lado la política y nominar un grupo independiente de expertos que funcione bien para ejercer en la junta. 
    • El Gobernador de Puerto Rico tiene un papel en la junta, y la Administración se compromete a garantizar que los puertorriqueños estén bien representados entre los miembros de la junta.
    • Esta junta de supervisión independiente está diseñada para que los líderes electos de Puerto Rico sigan siendo responsables de iniciar y dirigir la política económica. PROMESA deja claro que el Gobernador de Puerto Rico sigue siendo el encargado de desarrollar el plan fiscal quinquenal y los presupuestos anuales de Puerto Rico, y la Legislatura debe aprobar el presupuesto y las leyes necesarias para implementar el presupuesto.
    • Solo si, después de múltiples oportunidades para la revisión, el plan del Gobernador no logra reducir la deuda de Puerto Rico a un nivel sustentable o no protege las pensiones y los servicios esenciales, se permitirá a la junta de supervisión contrarrestar el plan del gobernador con un plan alternativo.
    • Además, fuertes disposiciones y requisitos de divulgación escritos en la legislación impedirán que todo aquel con un conflicto de intereses ejerza en la junta de supervisión.
    • Una vez que Puerto Rico se encuentre en el camino de la recuperación económica, la junta, por ley, se disolverá de forma permanente.
  4. MITO: PROMESA significará más austeridad y recortes en los servicios esenciales.
    • Puerto Rico ya se encuentra en una crisis financiera. Puerto Rico no puede permitirse la deuda $70,000 millones que ha acumulado durante una larga década de recesión, menos todavía los servicios gubernamentales básicos.
    • El 1 de julio, Puerto Rico se enfrentará a casi $2,000 millones de dólares en pagos para los que no tiene el dinero para pagar.
    • Sin las disposiciones que se expresan en PROMESA, los acreedores pueden presentar demandas para obligar a Puerto Rico a pagar sus deudas en lugar de proporcionar los servicios esenciales. Los tribunales pueden ordenar al Gobernador a pagar a los acreedores en lugar de pagar a policías, bomberos y hospitales.
    • PROMESA elimina la incertidumbre perjudicial de litigación compleja y prolongada y proporciona a Puerto Rico el respiro que necesita para centrarse en la prestación de servicios esenciales y la reestructuración de sus deudas. 
    • Además, PROMESA permitirá a Puerto Rico reestructurar todos sus pasivos financieros. Puerto Rico gasta más de un tercio de su presupuesto actual en pagos de la deuda, desplazando inversiones necesarias y forzando recortes en los servicios esenciales.
    • Al darle las herramientas que Puerto Rico necesita para reorganizar sus obligaciones insostenibles de pago de la deuda, PROMESA liberará fondos que en última instancia pueden ser invertidos en la economía local para atraer la inversión privada, crear puestos de trabajo y apoyar mejor a trabajadores y jubilados. 
  5. MITO: PROMESA no protege las pensiones.  Las pensiones en Puerto Rico recibirían una una mejor política con las leyes actuales de Puerto Rico, que con PROMESA.
    • Los trabajadores públicos en Puerto Rico tienen poca protección para sus pensiones sin PROMESA.
    • La constitución de Puerto Rico da prioridad a los pagos a los tenedores de bonos. A diferencia de los tenedores de bonos, las pensiones de Puerto Rico no tienen protección explícita o prioridad de pago en virtud de la Constitución de Puerto Rico.  Además, los pensionistas, a diferencia de muchos tenedores de bonos, no tienen un reclamo sobre ingresos fiscales específicos para el pago. 
    • La seguridad de la jubilación de los pensionistas de Puerto Rico estaría en grave riesgo si la enfrentan contra los acreedores de Puerto Rico en una carrera hacia el tribunal.  
    • Con PROMESA, se exigirá que Puerto Rico proporcione una financiación adecuada para apoyar las pensiones de cientos de miles de personas.
    • Puerto Rico tendrá prohibido expresamente equilibrar su presupuesto mediante la reducción de las pensiones. Sin una legislación, es probable que la falta de recursos del sistema de pensiones empeore.
    • A la vez, PROMESA no descarta litigaciones respecto a la legitimidad de la deuda de Puerto Rico.
    • En contraste con PROMESA, la cual protege a las pensiones, un incumplimiento desordenado de los pagos pone a las pensiones en grave riesgo. Sin esta legislación, los trabajadores de Puerto Rico no tienen la protección que se merecen.
  6. MITO: la junta supervisora puede ordenar que el Gobernador elimine empleos o reduzca los salarios.
    • La junta supervisora NO tiene la autoridad para eliminar empleos o reducir salarios.
    • PROMESA deja claro que el Gobernador de Puerto Rico sigue siendo el encargado de desarrollar el plan fiscal quinquenal y los presupuestos anuales de Puerto Rico, y la Legislatura debe aprobar el presupuesto y las leyes necesarias para implementar el presupuesto.
    • Únicamente si el presupuesto del Gobernador excede el nivel establecido por el plan fiscal, y después de muchas oportunidades de revisiones, se le permite a la junta supervisora hacer un llamado a reducciones de gastos o congelar la contratación de personal para equilibrar el presupuesto.
    • Sin embargo, la manera de implementar dichas reducciones de gastos o congelamientos en la contratación de personal, dependen por completo del Gobernador y de las leyes de Puerto Rico.
    • PROMESA no le da NINGUNA autoridad a la junta supervisora de dictar cómo se deben llevar a cabo las reducciones de presupuesto, de ser necesarias, ni tampoco exige la eliminación de salarios o trabajos.   
    • PROMESA sí exige que Puerto Rico reduzca su pago de la deuda, el cual actualmente abarca más del 30% de su presupuesto, a un nivel sostenible a fin de liberar ingresos para sostener las operaciones del gobierno y proteger los servicios fundamentales.
  7. MITO: la aprobación de PROMESA significaría rescatar financieramente a Puerto Rico o a sus acreedores.
    • PROMESA es lo opuesto de un rescate financiero.
    • PROMESA le ofrece a Puerto Rico la capacidad de reestructurar de manera exhaustiva sus obligaciones financieras y le brinda la supervisión fiscal adecuada y la transparencia para garantizar que se implementen reformas fiscales necesarias.
    • Reestructurar la deuda insostenible de Puerto Rico no le cuesta a los contribuyentes federales ni un solo dólar adicional.
    • En vez de ser un rescate financiera, PROMESA requiere un sacrificio compartido por parte de Puerto Rico y sus acreedores, requiere que todas las partes interesadas pongan de su parte para lograr una solución.
    • Como alternativa, un proceso no probado y potencialmente perjudicial con numerosas demandas de acreedores y de años de litigios, debilitaría la economía local, aumentaría los costos, retrasaría la recuperación de los acreedores y haría que la recuperación a largo plazo sea más difícil de lograr.
    • PROMESA le ofrece a Puerto Rico las herramientas que necesita con urgencia para resolver esta crisis de manera responsable.
    • Sin PROMESA, aumenta el riesgo de que el Congreso tenga que usar dinero de los contribuyentes  para evitar un desastre humanitario en Puerto Rico a la cara de una crisis descontrolada, desordenada y con un vertiginoso deterioro.